Foro EUROCITIES
Del 23 al 25 de enero tuvo lugar en
Barcelona el Foro de la Sociedad del Conocimiento*, que reunió a
personas expertas
en tecnología digital y responsables de la administración pública
para debatir en torno al tema “Dinero
Público - Código Público”.
Atendiendo al crecimiento demográfico y la incesante urbanización, el siglo veintiuno es considerado como el siglo de las ciudades. En su conjunto, estas representan apenas el 2% de la superficie terrestre, pero albergan a más de la mitad de la población del planeta (3.600 millones de personas) y consumen el 75% de los recursos producidos por la economía mundiali.
En
el marco global de la sociedad del conocimiento y de la
sostenibilidad planetaria, ¿cómo se están replanteando su papel
los gobiernos municipales y las administraciones públicas? ¿Y
de qué manera están contribuyendo o
reclamando los
ciudadanos su
participación en un ecosistema y una
economía política en
rápida transformación?
De ello se ocupan instituciones como la red EUROCITIES,
cuyos miembros forman parte de los gobiernos de las 140 ciudades de
Europa que la integran, y son responsables del bienestar de 130
millones de habitantes.
A
partir de este marco institucional, se han puesto en marcha proyectos
como DECODE,
que tiene por objetivo asegurar el control de los datos digitales por
parte de la ciudadanía. DECODE responde a problemas derivados de los
riesgos que presenta Internet para la identidad digital, el monopolio
de los datos en manos de un puñado de empresas tecnológicas o un
ecosistema digital fragmentado; problemas que impiden al usuario
final tener control sobre sus datos en Internet o decidir cómo crear
soluciones y servicios beneficiosos para la comunidad a partir de los
datos públicos.
Los proyectos piloto de DECODE, previstos entre 2018 y 2019, están
siendo simultáneamente
desarrollados
en las ciudades de Ámsterdam y Barcelona. [el
acrónimo DECODE
significa
Ecosistemas
de datos digitales de titularidad ciudadana y
descentralizada]
Por
otro lado, están las actividades de fundaciones y comunidades
académicas, profesionales y
ciudadanas que promueven el
software libre y el uso del código abierto tal como este ha sido
tradicionalmente empleado en los proyectos científicos desde finales
del siglo pasado. En el encuentro
de Barcelona participaron Fundación
del Software Libre de Europa (FSFE) y la
Fundación
por el Código Público (FFPC), dos
instituciones vinculadas a centros de investigación académica y de
I+D.
El
panel internacional de expertos abrió
el debate apuntando a la inversión
en código abierto (OS, open
source) emprendida por el
Gobierno municipal de Barcelona, según lo previsto en su Plan
de transformación digital.
El objetivo del Plan es conseguir lo que genéricamente se denomina
(como la) soberanía digital de
la ciudad, algo que persiguen
en su conjunto los
80.000 ayuntamientos que hoy se cuentan en los países de la Unión
Europea, según refirió Esteve
Almirall, director del Máster en Business Analytics de ESADE.
En nuestro siglo, las ciudades buscan cooperar antes que competir; y también compartir el conocimiento e integrarse en una Europa de las regiones más allá de los estados nacionales, con el fin de estar mejor preparadas para enfrentarse a los desafíos políticos, económicos y sociales de la globalización.
En nuestro siglo, las ciudades buscan cooperar antes que competir; y también compartir el conocimiento e integrarse en una Europa de las regiones más allá de los estados nacionales, con el fin de estar mejor preparadas para enfrentarse a los desafíos políticos, económicos y sociales de la globalización.
Infraestructura
como código
Como
responsable del desarrollo de
programas digitales en el Instituto
Municipal de Informática
de Barcelona, Xavier Roca presentó
el concepto de Infraestructura
como código (IaC), un tipo de
abstracción de la tecnología informática gracias a la cual los
paquetes tecnológicos son proporcionados y gestionados por
profesionales mediante software
en lugar de instalar sistemas de hardware.
La IaC puede emplearse en el suministro de sistemas de nube y también
para virtualizar diferentes entornos del software
(es decir, sin necesidad de
instalarlos en los discos duros de nuestras computadoras).
Esto
ha permitido, por ejemplo, la adopción de Linux
(sistema operativo de código abierto) en las estaciones de trabajo
del Ayuntamiento de Barcelona, lo cual ha comportado un importante
cambio de cultura. Con ello se ha conseguido romper los llamados
‘vendor lock-ins’ (monopolios comerciales)
y también ahorrar en licencias de
software.
Asimismo, se ha hecho público el código abierto del software
creado y se ha participado en proyectos como DECODE y FLOSSBCN;
esta última es una
plataforma abierta para debatir, compartir experiencias y fomentar
eventos en torno al software
libre.
Como
prioridades, Roca apuntó a la necesidad de exigir interfaces y
protocolos de comunicación en código abierto que permitan una mejor
gobernanza de estas comunidades.
Esto les ayudaría a estar mejor preparadas para incorporarse en uno
de los objetivos de proyecto DECODE: facilitar las bases y criterios
para que las PyMES puedan participar en las ofertas para la
contratación pública de los servicios digitales
a nivel municipal.
Campañas por el software libre y el código abierto
Alexander
Sander, responsable de políticas públicas de la FSFE, explicó las razones de Public
Money – Public Code,
una campaña que reclama leyes
para que el software financiado públicamente –desarrollado
para el sector público–
sea también de acceso público mediante una licencia de Software
Libre o de código abierto. Gracias a ello habría un mayor ahorro en
tecnología (incluyendo la recaudación fiscal) y existiría más
colaboración entre las administraciones y la ciudadanía; todo ello
contribuiría a generar servicios públicos innovadores y ágiles en
la infraestrucutura digital.
La
fundación también ha lanzado la Campaña
para defender la posibilidad de compartir código.
Este cuestión es mencionada en el artículo 13 de la Directiva
para la reforma de los derechos de autor de la Unión Europea.
A la campaña también se han adherido gigantes de las techs
digitales como Google,
aunque es difícil saber si lo hacen por las mismas razones y
propósitos que la comunidad del software
libre; lo cierto es que el control y bloqueo de los contenidos
protegidos por el artículo 13 afectaría a los repositorios de
código abierto como GitHub y WikiData y, por ende, el trabajo de
desarrolladores y empresas que dependen del ecosistema del software
libre y el código abierto.
Boris
van Hoytema, director de la FFPC,
señaló la necesidad de tener más personas programadoras en código
abierto y de avanzar en la creación de un ecosistema a nivel de los
gobiernos. Por esta razón, la Fundación se ha abocado a la tarea de
ofrecer herramientas prácticas en diversos aspectos como los de la
fiabilidad, el aseguramiento de la calidad y la seguridad, así como
en los ensayos, la gobernanza del
modelo financiero, la organización y el apoyo comunitario. La
Fundación busca, asimismo, convertirse en el referente histórico
que permita a las instituciones públicas mantener el control de su
infraestructura digital.
Eduardo
Romero presentó un resumen del plan
del Ayuntamiento de Zaragoza y su hoja de ruta en tres fases para
migrar su plataforma ofimática corporativa hacia el software
libre:
-
Adopción del código abierto en las Apps
-
Código abierto en todo el sistema operativo
El
administrador describió las
ventajas de los
llamados ‘formatos abiertos’,
que permiten
conservar y recuperar los archivos a lo largo de muchos años, una
cuestión indispensable cuando se trata con el histórico de
documentos de las administraciones públicas. La
administración local constituye un
entorno en el que es preciso considerar los condicionantes provocados
por el temor, la incertidumbre y la duda;
en la administración, nunca se
sanciona a un funcionario por su inacción, pero sí cuando este
actúa y toma las decisiones
equivocadas.
Algunas ideas surgidas durante el panel
Si
los últimos proyectos en los ámbitos de la Inteligencia Artificial
(IA) y el Aprendizaje Automático han sido desarrollados con código
abierto, ¿por qué no ocurre lo mismo con los proyectos digitales de
las administraciones públicas? Esto podría estar relacionado con la
estructura jerárquica que caracteriza a las administraciones, a
diferencia de la horizontalidad que es propia de la cultura de los
equipos científicos. Además, los funcionarios suelen ser reacios a
situarse fuera de territorio conocido y
adoptar algo distinto a lo que ya ha sido previamente ensayado y
usado. Por otro lado, el bajo índice de adopción del código
abierto podría deberse al alto coste en recursos humanos que
implicaría la formación de todo un cuerpo de funcionarios, sin
garantías de que estos no se vean abrumados por las novedades
relacionadas con la plataforma ofimática y la interfaz de atención
al ciudadano(burocracia
lenta vs. tecnología rápida).
¿Es
posible plantear un modelo federativo para las plataformas digitales
de las administraciones públicas municipales? Quizá en Europa
estemos más preparados a dar ese salto que nos lleve de los Centros
de datos al uso a las nuevas plataformas digitales en la nube en que
se pudiera crear “un ecosistema
de los
procesos
de poder para que
estos funcionen
en beneficio de todos” (Boris van Hoyten).
En
un contexto
político-administrativo en el que
los niveles de gobierno no suelen coincidir,
quizá haya que prestar atención
a los proyectos que proponen
Digital
Europe (la
principal asociación comercial europea que representa a las
industrias transformadoras en el ámbito digital),
el proyecto FLOSSBCN,
la plataforma de participación
ciudadana Barcelona
Decidim
y la comunidad
Metadecidim; quizás sus
propuestas nos estén dando
las claves para la
creación de un mercado que adopte las soluciones de software
libre y el código abierto en la gobernanza democrática de nuestras
ciudades; un mercado abierto que
relacione
sus iniciativas
más allá de las fronteras nacionales y los territorios,
de un modo distinto al de los grandes monopolios corporativos.
*El encuentro también acogió la presentación de la recientemente creada Coalición por los derechos digitales.
*El encuentro también acogió la presentación de la recientemente creada Coalición por los derechos digitales.