19 mayo 2011

La España indignada
















..y de pronto surgió, como un efecto del polen primaveral. El malestar de la sociedad española frente a su clase política se transformó en indignación el 15 de mayo, y ha tomado la calle en estos días de campaña de las elecciones municipales.

Bajo una consigna sencilla y directa que reclama “Democracia real yao que advierte “No somos marionetas en manos de políticos y banqueros”, miles de personas empezaron a congregarse a través de sus cuentas de FB y Twitter el pasado domingo en la plaza del Sol de Madrid, y en otros espacios públicos de Valencia, Barcelona y Sevilla así como en decenas de otras ciudades españolas. La junta electoral de la Comunidad de Madrid ha desautorizado la concentración en la capital, pero los manifestantes se han resistido a abandonarla y han organizado una acampada reivindicativa y pacífica. Otras ciudades también han prohibido las manifestaciones, argumentando que impiden el derecho a ejercer el voto libremente, y solo la junta de Valencia ha permitido la manifestación. En el documento de solicitud de autorización para sus manifestaciones, los convocantes establecen que “la reunión convocada tiene como objeto principal, no la captación de sufragios, sino el de hacer una llamada al ejercicio del voto responsable de cara a las próximas elecciones”, y el de poder también ejercitar los derechos fundamentales de reunión y de expresión.

La afluencia a estas manifestaciones compite con la de los actos convocados por los partidos en plena campaña de las elecciones que se celebran el próximo domingo, 22 de mayo. En Valencia, el Partido Popular llena una plaza de toros hasta los topes para vitorear a Francisco Camps, su candidato a la Presidencia de la Comunidad autónoma a pesar de estar imputado por cohecho. No es el único: la prensa española informa que en estas elecciones figuran más de 100 candidatos en las listas de los partidos a pesar de ser investigados o tener causas pendientes con la justicia por delitos de corrupción.

En esta crisis económica y política que azota a España y a Europa, los españoles han alcanzado el límite tolerable de la desigualdad: un 20% de desempleo que sube a 43% si consideramos a la población juvenil que no ha tenido un primer trabajo. Cientos de miles de personas que han perdido sus casas por impago de la hipoteca. Recortes salvajes en los programas y políticas sociales que afectan a la sanidad, la educación y las políticas de asistencia social; todo para poder cumplir con los objetivos de déficit de la Eurozona. Todo esto en un país cuyo Estado de Bienestar no llegó a cuajar en comparación con países como Alemania o Francia, y cuyos ciudadanos se amparan tradicionalmente en la red familiar en las épocas de crisis. Pero el hartazgo y la indignación han estallado, la decepción por su clase política y su sumisión a la consigna de “privatizar la ganancias, socializar las pérdidas” al estallar la crisis de la burbuja financiera en 2008, ha llegado a su punto de ebullición. Este movimiento de hartazgo e indignación, de alcance europeo y que se repite en cientos de ciudades de este continente, tiene a los jóvenes entre sus principales protagonistas.

Para el analista Josep Ramoneda, en España “las desigualdades han crecido de forma exponencial, poniendo en riesgo el óptimo de desigualdad, a partir del cual aparece la amenaza de fractura. En la pugna entre poder económico y poder político siempre ha llevado ventaja el primero, pero en esta crisis la sumisión de la política ha sido tan grande, que es muy difícil verla como un contrapeso en favor del interés general”.

Es tanta la desconfianza que algunos analistas auguran la refundación de los partidos en España, el fin del bipartidismo y la necesidad de reflexionar sobre la extraordinaria confusión que impera en la clase política de este país. No es de extrañar que los ciudadanos tomen la calle ya no solo como votantes sino como partícipes y revitalizadores de una democracia alicaída y secuestrada por los intereses creados.

11 mayo 2011

Elecciones Perú 2011

Tanto si votas como si no... reflexiona
















El ambiente de inquietud y polarización, inevitable en esta segunda vuelta electoral, y una campaña donde abunda el juego sucio y se confunde al adversario político con el enemigo a destruir, nos llevan a reflexionar sobre la joven democracia peruana.

En España también, los peruanos y las peruanas participan y se manifiestan en el contexto de las elecciones municipales que se celebran el 22 de mayo en un clima de hartazgo y preocupación por la larga crisis económica y con la vista puesta en el rediseño de la correlación de poderes en esta España de las Autonomías y la resistencia de los grandes partidos a soltar el mango y la sartén, lo que permitiría el nacimiento y consolidación de una democracia de la ciudadanía, y un debate público que destierre por fin el clásico diálogo de sordos en la política española.

Peruanos y peruanas x unas elecciones limpias agrupa a personas y asociaciones vinculadas a la izquierda política española y peruana. Ayer difundieron un comunicado en el que expresan su preocupación por el ambiente de crispación y juego sucio promovido por los medios y grupos de poder económico durante la campaña electoral peruana. Puede leerse su comunicado en FB, al igual que la acción de lavado de bandera convocada por NO a Keiko - España.


También existen votantes que dan su firme apoyo a Keiko Fujimori en estas elecciones y han organizado actos de apoyo a su candidatura; como por ejemplo, los miembros de la Asociación Virú, nacida al calor del programa Nous Catalans de relaciones con la población inmigrante de CDC, partido miembro de la coalición nacionalista de la derecha catalana Convergència i Unió, que actualmente preside el gobierno autonómico de Cataluña. No figuran, sin embargo, españoles de origen peruano en la lista de este partido que el año pasado proponía límites a la inmigración y un sistema especial de identificación para los extranjeros llegados a Cataluña.


Por su parte, las listas de Iniciativa per Catalunya/Esquerra Unida i Alternativa incluyen a la psicóloga de origen peruano Ursula Santa Cruz, quien en su invitación a un acto proselitista señala que trabaja "por alcanzar la igualdad de género, el reconocimiento pleno de nuestra ciudadanía como personas migradas y mi implicación ciudadana con mi país de origen".


Candidata por ICV/EUiA en Barcelona, Ursula Santa Cruz